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      "Tenemos Una Gran Responsabilidad y Un Compromiso de Continuar Esta Herencia Política, Ideológica y Humanista"

      Discurso por Wilfredo Pérez Bianco, Consul General de la Republica Bolivariana de Venezuela en Vancouver

      Quisiera comenzar explicando el significado que tiene para los venezolanos uno de los procesos más importantes de nuestra historia: LA INDEPEDENCIA de nuestro país hace 205 años, la cual nos permitió y brindó la libertad de ejercer nuestro derecho a ser lo que somos: VENEZOLANOS, a ser libres, independientes y soberanos.

      El 19 de abril de 1810 se Declaró la Independencia, y el 5 de julio de 1811 se firmó el Acta de la Independencia, que sentenció el surgimiento y creación de la República y nuestra irrenunciable decisión de ser un pueblo libre y dueño de nuestro destino, de nuestra propia historia, todo gracias a la grandeza y larga lucha de hombres que estuvieron bajo el liderazgo del padre de la patria Simón Bolívar.

      Había nacido Venezuela, como lo expresó el historiador colombiano, Ignacio Sánchez Tirado:
      “La historia del nacimiento de una República soberana parecía escrita, pero faltaban aún los capítulos de las cruentas luchas. Faltaba consolidar con sangre la decisión del pueblo. Faltaban lo héroes que salieron de las llanuras venezolanas para unirse con los colombianos, con los ecuatorianos, con los peruanos y con los bolivianos. Faltaba Carabobo, Boyacá, Pichincha y Ayacucho y por último faltaban las páginas sublimes del personaje central que lo hizo todo realidad: faltaba para coronar aquella gesta, Simón Bolívar".

      El Libertador, recorrió casi todos los países de América para buscar su independencia y asegurar para nuestros pueblos, incluido Venezuela, un futuro de dignidad, libertad y respeto, donde la solidaridad entre los pueblos fue una herramienta poderosa para lograr la emancipación y avanzar en aquellos tiempos de lucha.

      El Coronel Gentil Almario Vieda, miembro de la Academia Colombiana de la Historia dijo que:
      “El camino iba a ser largo, el sacrificio enorme y los padecimientos del pueblo casi inverosímiles. La guerra más larga y más sangrienta por la libertad se libró en su suelo. Con toda razón se ha afirmado que Venezuela fue la cuna de la Libertad de la América española”.

      Como dijera el Libertador en 1829:
      “No he logrado otro bien que la independencia. Esa fue mi misión. Las naciones que he fundado, luego de prolongada y amarga agonía, sufrirán un eclipse, pero después surgirán como estados de una Gran República: América!”.

      Por ello, dentro del proceso Bolivariano actual, siempre se ha insistido en el rescate del pensamiento de nuestro Libertador Simón Bolívar respecto a la integración de los pueblos para la defensa de su soberanía, autodeterminación e independencia, y la no intervención en los asuntos internos.

      En Venezuela, la solidaridad con los pueblos del mundo está consagrada en nuestra Constitución Nacional. La misma establece que nuestro país promoverá y favorecerá la integración latinoamericana y caribeña en aras de avanzar hacia la creación de una comunidad de naciones, defendiendo los intereses económicos, sociales, culturales y ambientales de la región, como parte del derecho de estos pueblos a defender su modelo social y político de acuerdo con lo establecido en el Derecho Internacional.

      Nuestra política exterior Inspirada en la visión de armonía que caracteriza la formación de nuestros pueblos indígenas originarios, y en la concepción bolivariana de que la acción política internacional debe tender a conformar el “equilibrio del universo”, ha venido impulsando la conformación de un mundo pluripolar, cuyo fin último es la preservación de una paz fundamentada en el respeto y la soberanía de los pueblos.

      La bandera de la paz y la integración, ha desplegado todos sus esfuerzos para “obtener el sistema de garantías que, en paz y guerra, sea el escudo de nuestro nuevo destino”, en un entorno internacional que garantice la Independencia de la Patria para el pleno despliegue de un proyecto nacional soberano.

      En este marco, el gobierno bolivariano ha impulsado el ingreso de Venezuela como miembro pleno en el MERCOSUR, ha creado la ALBA-TCP y PETROCARIBE, y ha impulsado la creación de la UNASUR y la CELAC, junto a los pueblos hermanos de América Latina y el Caribe.

      Igualmente, nuestra diplomacia de paz logró el 16 de octubre de 2014 para Venezuela, la aprobación de la Asamblea General de las Naciones Unidas para formar parte como miembro no permanente del Consejo de Seguridad, durante 2 años (2015-2016), con 181 votos a favor de los 182 países presentes.

      Luego en el año 2015, por primera vez nuestro país ocupó de manera simultánea, un puesto en el Consejo de Seguridad de la ONU y la Presidencia Pro Tempore (PPT) del Movimiento de Países No Alineados, convirtiéndose en el tercer país latinoamericano en ejercer la presidencia, después de Cuba y Colombia.

      El 9 de marzo de 2015, el presidente de Estados Unidos firmó un Decreto (Orden Ejecutiva) donde señalaba que “la situación en Venezuela representa una amenaza para la seguridad interna” de su país. Los Jefes de Estado de los países miembros del ALBA-TCP, UNASUR, CARICOM y AEC, se pronunciaron en contra del mismo y durante la VII Cumbre de las Américas celebrada en abril de 2015, el presidente Nicolás Maduro entrego más de 11 millones de firmas solicitando su derogación inmediata, llamado que fue acompañado por todos los gobiernos de la región quienes manifestaron su solidaridad y respaldo a Venezuela.

      Ese mismo año, el 28 de octubre de 2015 Venezuela es nuevamente reelegida en el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el período 2016 – 2018.

      El pasado 23 de abril de este año, Venezuela asumió la Presidencia Pro Tempore (PPT) de la UNASUR, con el compromiso de “fortalecer la unidad regional ante los ataques contra las democracias latinoamericanas promovidos por sectores conservadores dentro y fuera del hemisferio sur”.

      El reciente 14 de junio de 2016, en la ciudad de Nueva York, la República Bolivariana de Venezuela resultó electa como miembro principal del Consejo Económico y Social de Naciones Unidas (ECOSOC) con 177 votos, junto con Colombia y San Vicente y las Granadinas para representar al grupo regional de América Latina y el Caribe.

      Por otra parte, el 23 de junio de este año, fue derrotada la Pretensión del Secretario General Luis Almagro de aplicar la Carta Democrática a Venezuela. El Consejo Permanente de la OEA decidió tomar Nota. Ningún delegado solicitó someter lo discutido a votación. Por el contrario, la mayoría de los países miembros se pronunció a favor de continuar con los diálogos solicitados por el presidente Maduro y promovido por la UNASUR, junto a los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero (España), Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá) entre el gobierno y la oposición, avalando así la legitimidad del gobierno del presidente Nicolás Maduro e invalidando la supuesta ruptura del orden constitucional.

      Para finalizar, quisiera expresar que, Hugo Chávez, nos enseñó a ver y sentir a Bolívar de otra manera y a defender siempre la autodeterminación de cada uno de nuestros pueblos, por ello, tenemos una gran responsabilidad y un compromiso de continuar esta herencia política, ideológica y humanista.

      Como dice el presidente Nicolás Maduro:
      “hoy seguimos leales por el camino de Bolívar, defendiendo nuestra Patria y forjando victorias con el Legado de Chávez. Yo seré el presidente de la paz de esta Patria, no habrá chantaje de nadie, creo en la paz como el único camino para la prosperidad, para la vida, para el socialismo, para el desarrollo de las garantías y derechos sociales del pueblo”.

      ¡Viva Venezuela!
      ¡Viva Canadá!
      ¡Viva la Patria Grande!
      ¡Viva la Revolución Bolivariana!
      ¡Muchas gracias!

      Discurso pronunciado en la celebración por el Movimiento 26 de Julio y los logros de la revolución cubana , así como el 233 cumpleaños de Simón Bolívar, organizado por Comunidades de Vancouver en Solidaridad con Cuba (VCSC)





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